sábado, 11 de febrero de 2012

BAÑOS DE LECHE

                                                                            

¿Quién no sabe que Cleopatra se bañaba en leche de burra? Y hacía muy bien, ya que los baños de leche son uno de los mejores tratamientos de belleza que puedes realizar para conseguir una piel luminosa y renovada.
La leche se ha utilizado desde hace milenios para embellecer la piel de las damas de la alta aristocracia de todas las épocas. También nosotr@s podemos recurrir a ella.
Son muchas las recetas de belleza, tradicionales e industriales, que utilizan la leche y sus derivados, especialmente el suero y el yogur, como ingredientes activos. Pero, ¿por qué utilizar la leche como cosmético? ¿Qué hace por nuestra piel? Lo primero y más llamativo que vemos es que después de un baño de leche la piel aparece lisa, sin irregularidades, brillante y renovada. La razón es que la leche es un exfoliante natural de primer orden, es decir, produce una ligera abrasión o peeling de la capa externa de la piel eliminando las células muertas y, con ellas, las toxinas, manchas e irregularidades, como pequeñas arrugas o acumulaciones de piel muerta. Esto es debido a que la leche fermentada contiene ácido láctico, un alfahidroxiácido o AHA natural que también se encuentra en el yogur y que además de exfoliar tiene un alto poder hidratante, por lo que suele usarse en cosméticos anti-envejecimiento. Al eliminar capas superficiales de la piel, estimula también la regeneración celular. Sin embargo, en personas especialmente sensibles puede causar reacciones alérgicas y sensibilidad a los rayos ultravioletas.

Trucos de Belleza con Leche
1. Leche hidratante: Si notas en el rostro sensación de tirantez pero se te ha acabado la crema hidratante un remedio efectivo para salir del paso es pasarte un algodón empapado de leche por la cara. Veras como notas la piel más confortable.
2. Desmaquillante: Si estas acostumbrada a usar desmaquillador, y se te ha terminado lávate la cara con un poco de leche, sécala bien con un pañito de algodón, y aplícate un tónico. Tu piel quedará limpia y tersa.
3. Piernas sin rojeces: Si después de depilarte las piernas aparecen rojeces, empapa un paño en leche fría y ponlo sobre las piernas.
4. Dormir mejor: Un vaso de leche caliente con una cucharadita de miel es un remedio contra en insomnio que ya practicaban nuestra abuelas. Tómalo a sorbitos pequeños.
5. Pies suaves y descansados: Mezcla 1/2 taza de sal gorda con 1/3 de aceite de oliva. Por otro lado, calienta un litro de leche entera. Introduce los pies en la leche durante 10 minutos. Después enjuágalos y a continuación frótalos con la mezcla de sal gorda y aceite de oliva. Por último aplícate crema hidratante y ponte unos calcetines de lana.
6. Exfoliante natural: Para tener una piel suave, mezcla dos cucharadas de avena molida, una cucharada de miel y una de leche hasta lograr una mezcla uniforme. Ponla sobre la piel durante 15 minutos y enjuaga con agua tibia. Es una exfoliante suave que va bien tanto para pieles secas como grasas.
7. Manos más blancas y uñas más fuertes: Frota las manos con leche. Deja que se sequen al aire. Vierte una gotas de limón en un recipiente con aceite y frota las manos de nuevo con esta mezcla. Con un algodoncito empapado insiste en las uñas. Ponte unos guantes viejos de lana y déjalos al menos un par de horas. Si puede ser toda la noche mejor.
8. Manos más suaves: Pon a cocer una patata, cuando se enfríe, pélala y aplástala añadiendo dos cucharadas de leche fría y dos de miel. Aplica esta mezcla en las manos. Déjala actuar durante 15 minutos y retírala después con agua tibia.
9. Ojeras y bolsas: Mezcla una patata con la piel bien limpia con miga de pan empapada en leche. Túmbate y aplica el preparado sobre los ojos dejándolo actuar de quince a veinte minutos, mientras te relajas.
10. Aliviar ampollas: Para aliviar las ampollas en los pies puedes realizar una pasta casera muy efectiva. Cuece unas hojas de col en medio litro de leche. Déjalo enfriar y pásalo por la licuadora y aplica esta mezcla sobre las ampollas.
11. Mascarilla para pieles grasas: Cuece y pela una patata. Añádele dos cucharadas de leche, miga de pan remojada en leche y unas gotas de limón. Mézclalo bien a mano o en la licuadora y aplícatelo en el rostro como una mascarilla. Mantenla de 15 a 20 minutos y luego, retírala con agua fría.
12. Baños hidratantes: Este remedio se conoce desde antiguo. Añade al agua del baño dos vasos de leche. Si eres constante, tu piel se conservará elástica y tersa.
                                              

Espero que os guste esta entrada y que utiliceis remedios a base de leche.Hay productos para el cabello hechos de leche que son buenisimos para hidratarlo.Un saludo y dejad vuestros comentarios que siempre me serviran de ayuda.